Entendamos la relación entre la exposición a PFAS y el cuerpo humano

Casi todas las personas en los Estados Unidos tienen cantidades medibles de sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS) en la sangre. La concentración de PFAS en la sangre indica la cantidad de estas sustancias que hay en el organismo y se determina según la cantidad de PFAS a las que haya estado expuesta la persona (exposición), menos la cantidad de PFAS expulsadas del organismo (eliminación).

La exposición y la eliminación son distintas en cada persona. Por ejemplo, dos miembros del mismo hogar pueden tener concentraciones muy diferentes de PFAS en su organismo.

La exposición sucede cuando una persona respira, come, bebe o toca una sustancia química y esta entra en su cuerpo.

¿De qué manera se exponen las personas a las PFAS?

Algunas formas en que las PFAS pueden entrar en el cuerpo son:

  • beber agua de fuentes municipales o pozos privados contaminados por PFAS,
  • consumir alimentos producidos cerca de lugares donde se usaron o elaboraron PFAS,
  • consumir pescado capturado en agua contaminada por PFAS,
  • consumir alimentos empacados en materiales que contienen PFAS,
  • tragar o inhalar tierra o polvo contaminados, o
  • tragar accidentalmente residuos o polvo de productos de consumo que contienen PFAS, tales como alfombras resistentes a las manchas y ropa repelente al agua.

Las investigaciones han indicado que la exposición a PFOA y PFOS de los productos de consumo actuales generalmente es baja y, para la mayoría de las PFAS, ducharse, bañarse o lavar los platos con agua que contenga PFAS también sería una exposición baja, especialmente cuando se compara con las exposiciones a agua para beber contaminada.

Los niños pequeños podrían tener más probabilidades de tener PFAS en el cuerpo porque tienden a morder los juguetes y las telas y se llevan las manos a la boca con frecuencia.  Los niños también pueden estar expuestos al beber fórmula mezclada con agua contaminada por PFAS o leche materna de personas expuestas a PFAS. Las PFAS pueden pasar de la madre al bebé durante el embarazo.

En las comunidades donde el agua potable está contaminada con PFAS, el agua puede ser la fuente de exposición principal. En otras comunidades, las fuentes de exposición pueden variar.

Para obtener información sobre exposiciones en el lugar de trabajo, visite la página web sobre PFAS del Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional (NIOSH)*.

La eliminación es el proceso mediante el cual sustancias, como las PFAS, son expulsadas del organismo.

¿Cómo se eliminan las PFAS del organismo?

  • Algunas PFAS son eliminadas del organismo lentamente con el tiempo, principalmente a través de la orina. Las personas que tienen enfermedad de los riñones no siempre eliminan a través de la orina la misma cantidad de PFAS de su organismo que las personas sanas.
  • Algunas PFAS son eliminadas periódicamente a través de la sangre durante la menstruación. Quienes menstrúan a veces eliminan más PFAS que quienes no menstrúan.
  • Algunas PFAS pueden ser eliminadas a través de la leche materna. Las personas que amamantan podrían eliminar más PFAS de su cuerpo que aquellas que no lo hacen.
  • Todos estos factores podrían afectar la concentración de PFAS en la sangre. Mientras que los resultados de las pruebas de sangre para detectar PFAS le pueden decir la cantidad de ciertas PFAS que hay en la sangre, los resultados no proporcionarán información para identificar un problema de salud y no predecirán resultados de salud en el futuro.
  • Puede hablar con su proveedor de atención médica sobre los beneficios y las limitaciones de las pruebas de sangre para detectar PFAS.

* Los enlaces a sitios web llevan a páginas en inglés.